Las excavaciones realizadas por alumnos del taller de empleo, dirigido por el arqueólogo Luis Lozano, han sacado a la luz los restos de unas antiguas dependencias del Palau del Castillo de Segorbe, del que dan cuenta las fuentes documentales.
Los trabajos se han desarrollado en un área de unos 400 m, situada en la parte oriental del cerro en cuya ladera se asienta la ciudad. Se trata de la zona noble del antiguo castillo, que fue reconstruido a finales del siglo XV por el duque de Segorbe, Enrique de Aragón, conocido como el Infante Fortuna.
Según señaló Palomar, «se han encontrado un total de seis dependencias y la sorpresa ha sido que, además de los muros que delimitan estas dependencias, se ha hallado in situ un buen número de azulejos completos que corresponderían a finales del siglo XV».
Palomar remarcó que los hallazgos son importantes «porque reflejan esa suntuosidad de la que hablan las fuentes documentales, aunque desgraciadamente después del arrasamiento de finales del siglo XVIII, aquello quedó destrozado».
Cabe resaltar el hallazgo de la cimentación de una de las torres del antiguo castillo, que rebasaba el perímetro de la actual muralla carlista, y se ha documentado la trinchera del siglo XIX.