La Torre del Pozo de Cehegín (Murcia), que data del siglo XII, es un ladrón de aguas, que se construyó debido a que las cisternas y el abastecimiento de la ciudad eran escasos. La Torre llegaba a los niveles freáticos del río Argos y se encargaba de suministrar agua a todos los ciudadanos de la villa. Era una época en la que se moría de hambre o de sed, por lo que, ante el temor de que la Torre del Pozo fuera asaltada y destruida, se mandó construir también la Muralla Almohade, que toma este nombre en honor a sus constructores, los almohades.
En primer lugar, se llevarán a cabo tareas de limpieza y búsqueda del yacimiento arqueológico, ya que, tras varias catas arqueológicas, se ha confirmado que el Alcázar tiene una potencia estratigráfica (restos arqueológicos) que va del siglo XI al XVIII.
