Las catas realizadas por los arqueólogos en los dos solares que limitan con la avenida del Mengue y el templo románico de Santo Tomé siguen dando fruto, a pesar de que aún se está en la primera fase de los trabajos de excavación, previos a la construcción de viviendas. El hallazgo más interesante desde el punto de vista arqueológico es un enterramiento de finales del siglo XII, «el último nivel de inhumación» que corresponde a la necrópolis de la iglesia. El director de esta excavación explicó que ya se conocía la existencia del cementerio a partir de los trabajos de documentación, cuando se llevó a cabo la restauración del templo y la excavación arqueológica correspondiente, a principios de la pasada década de los noventa.
La primera fosa, excavada en terreno arcilloso, apareció en la cata número cinco. El cuerpo estaba orientado como manda la tradición cristiana. «Los enterraban de naciente a poniente, y en posición orante o durmiente, en decúbito supino con los brazos semiflexionados y colocadas las manos sobre la zona ventral o pectoral».
El primero de los esqueletos apareció sin ajuar alguno que permita a los investigadores obtener, a primera vista, más datos sobre la extracción social a la que pertenecía. Con toda seguridad, apuntan los especialistas, hay otros muchos enterramientos en el extenso solar. La necrópolis de Santo Tomé guarda paralelismo con otros cementerios similares.
La cata número seis también ha ofrecido hallazgos: silos con restos de cerámica medieval y tenerías, aunque estos agujeros para curtir pieles o teñir tejidos son mucho más evidentes en el solar contiguo, más próximo a un tramo del tercer recinto amurallado. «Se confirma que esta era una zona industrial, de transformación de materias primas y tintado de telas y pieles», señaló el portavoz de Strato.
Los trabajos continuarán con la excavación de los silos y los enterramientos y también se realizará un seguimiento del vaciado del solar contiguo al tramo de muralla del tercer recinto. La excavación permitirá «en dos o tres meses, a lo sumo, tener una perspectiva histórica y arqueológica muy completa» de esta zona de la ciudad.